Aunque los actos de crueldad humana suelen ser atribuidos a instintos atávicos procedentes de anteriores etapas de la evolución biológica, lo cierto es que nuestra especie es la más despiadada de cuantas habitan el planeta: dentro del reino animal, sólo el hombre ha llegado a extremos de conducta que llevan aparejada la destrucción sistemática de miembros de su propia colectividad. ANTHONY STORR, escritor y psiquiatra, estudia las diversas teorías que a partir de Freud han tratado de descubrir las raíces de 'LA AGRESIVIDAD HUMANA' y analiza las formas que ésta adopta durante los sucesivos períodos de desarrollo humano y en los comportamientos neuróticos y psicóticos. «El sano sentido común con que ha sido escrito el libro subrayó en su día Konrad Lorenz, una de las autoridades máximas en la materia lo hace comprensible para todo el mundo.» A juicio de Storr, la agresividad del hombre es un instinto cuyos efectos pueden ser controlados y encauzados, pero en ningún caso suprimidos.