En los últimos 30 años, el fotógrafo francés Antoine d'Agata (nacido en 1961) ha realizado varios viajes en México. Como fotógrafo, d'Agata tiende a centrarse en tabúes sociales como la adicción y la prostitución, y se enreda directamente en estas partes más oscuras de la naturaleza humana. "No es la forma en que los fotógrafos miran al mundo lo que es importante", ha señalado d'Agata. "Es su relación íntima con eso". Este libro es un registro de los viajes mexicanos del fotógrafo, un diario tenso e inmóvil de sus experiencias en los paisajes devastados de una sociedad criminal cada vez más volátil. Las imágenes fijas, las narrativas cinematográficas y los textos conforman un diario personal que, a través de encuentros íntimos, sexuales y narcóticos, construye una realidad cada vez más repugnante. Reflejando su viaje mientras vaga por un mundo solitario y marginal, el lenguaje fotográfico de d'Agata parece fracturarse y degenerarse página por página. En su conjunto, México presenta un retrato complejo y difícil de un período que se ha construido como un tiempo de anarquía y criminalidad en la sociedad mexicana. D'Agata estructura el libro en torno a seis movimientos fotográficos, que se relacionan directamente con diferentes momentos en la historia contemporánea de México. Estos capítulos sugieren rupturas en la continuidad de la historia, incluso cuando D'Agata crea una narrativa de descenso al dolor y al salvajismo.